Estoy de acuerdo en que es importante educar líderes pero me fastidia un poco esa consigna. Hay que educar teniendo en cuenta el temperamento de cada uno, ayudando a formar su carácter.
Esta entrada se la quiero dedicar a esos chavales que,líderes o no, resisten las embestidas de la sociedad actual y conviven con la tensión y la angustia de comportarse como auténticas personas. Mi más rendida admiración.
En casa tenemos de todo, de los que acometen y se enfrentan y de los que se defienden. Podemos darnos por satisfechos. Unos y otros, son -o serán- auténticos espartanos, que corren hasta la extenuación por alcanzar el balón en los encuentros deportivos. Educar en la reciedumbre es fácil si eres recio.
Tampoco se les da mal reirse de sí mismos, herencia que han recibido de Luis y éste del espíritu guasón heredado de su familia, que, después de muchos lloros y protestas, ha terminando inundándonos a todos.
Pero, lo más importante: la fortaleza de espíritu, es una batalla en la que todos luchamos cada día -padres e hijos- y -¡ahí nos duele!- porque hay que predicar con el ejemplo.
En todo caso tratamos de transmitir que no todo es relativo. El relativismo engendra mediocres porque ¿para qué esforzarse si todo vale lo mismo?.
Pues no, no todo tiene el mismo valor. La afirmación de que todo es relativo , de que no existe una verdad absoluta, deja al hombre sin esperanza. Es una lacra de la sociedad actual en que el relativismo se convierte en la única verdad absoluta, porque en contradicción con su propio predicado, consagra al menos una verdad absoluta: que todo es relativo.
Queremos transmitirles que no están abandonados a la suerte, que harán algo, poseerán algo, serán algo si ellos lo deciden y se comprometen.
¡Cómo me están gustando tus últimas entradas especialmente! Las siento como una reafirmación, como acompañamiento. Gracias.
ResponderEliminarUn beso.
Pues yo de tres, tres caracteres distintos y tres disposiciones ante la vida, y ninguno apunta para lider.
ResponderEliminarCasi que diría yo "por suerte"
(Me encantan estos ratillos)
...no lo tienen fácil, nuestros chicos, pues les está tocando vivir momentos difíciles en esta sociedad en la que, como bien decís, todo vale, y en ocasiones les confunde, pero me alegra saber que no estamos solos, que muchas personas seguimos pensando que los auténticos valores no tienen fecha de caducidad.Enhorabuena por vuestro blog.
ResponderEliminarPIlar.
Es cierto que nuestros hijos lo tienen difícil, sin embargo también lo es que gente como nosotros les estamos formando para que salgan adelante, y a juzgar por el esfuerzo que cuesta, estoy segura de que les ayudará en su vida lo que hoy les estamos ofreciendo. Besos.
ResponderEliminarMagnífica la reflexión: El relativismo engendra mediocres porque ¿para qué esforzarse si todo vale lo mismo?. No todo vale lo mismo, todo esfuerzo conlleva su recompensa.
ResponderEliminarEstoy segura q si se van a comprometer...
ResponderEliminarun beso ♥
Si todos tuvieran madera de líderes entonces, ¿quién los seguiría? ¿a quién van a liderear?
ResponderEliminarCada quien tiene que descubrir lo que hay dentro de sí, y como dices, crecer en ello.
Y depende de nosotros enseñarles en dónde está la Verdad.