Nos vamos a Milán al encuentro con el Papa. Va a ser un viaje relámpago, de viernes tarde a domingo.
En nuestra familia somos muchos y hay muchas anécdotas. Se podría escribir un libro. Pero lo excepcional apenas se ve, ni interesa, porque no va rodeado de brillo ni trompetas.
Lo verdaderamente maravilloso es que a pesar de los pesares cada vez quiero más a Luis, y eso es un milagro, no por él sino por mí. ...voy a Milan, sí, -para hacer cuerpo- pero tambiien para gradecer a la Iglesia y estos Papas Santos lo que han hecho por la familia, por mi familia
Suelen decir que para querer a los demás, primero uno ha de quererse a sí mismo. Yo discrepo, pues lo primerísimo es que alguien te ame incondicionalmente, a partir del tuyo también esfuerzo.
ResponderEliminar'Docendo discimus'
Que alegría me dio veros en Milano!!!!
ResponderEliminarQue pena me dio despedirme de vosotros.......