Preparando la vigilia de la Inmaculada

Queridos hijos:
He recibido un mail de Fer y Fran preguntado si es inexcusable lo de ir a Lourdes…. Ya hace unos años que es evidente que no, que estos viajes ya solo son una propuesta que papá y yo hacemos.

Como debierais saber hemos descubierto que esas avanzadas en busca de gracia conmueven a la Virgen e intercede por nosotros. En ellas sacamos fuerza para seguir adelante y pensamos que a ello se debe que la vida sea armoniosa a pesar de nuestras debilidades e incapacidades. Es un tesoro que hemos descubierto y que os seguimos ofreciendo.

Dios respeta la libertad exquisitamente a todos, nosotros debemos imitarle en la medida que seamos capaces, así que el planteamiento es: … si quereis venir a Lourdes tenéis que, ademas de hacer un sitio entre vuestros compromisos, tener ganas de venir.

El lunes se me ocurrió decir a los niños que tenían que estar atentos porque Dios respetaba totalmente nuestra libertad, al contrario que el demonio, que quería esclavizarnos. Se me ocurrió decirles que Jesús y María llamaban suavemente a nuestra puerta, pero solo entraban si nosotros abríamos, sin embargo el demonio aprovechaba las rendijas y ocupaba todos los espacios que no habíamos llenado con Dios y su Madre.

Nosotros intentamos en estas peregrinaciones tapar esas rendijas que, sin darnos casi cuenta, se abren cada día. Hemos encontrado en las peregrinaciones una buena medida, pero cada uno debe buscar su solución para llenarse de Dios.

En principio a Lourdes íbamos a ir solo con los 5 pequeños, yo no paro de insistir a papá para que no os cuente a los mayores, pero él erre que erre porque le da pena no incorporaros a todos.

Podéis venir o no, solo vosotros sabeis valorar lo que debéis hacer. Además para ocupar vuestras plazas nos quiere acompañar Luis José y una amiga de Carmen.

Pero tampoco os quejéis si en otras ocasiones no os decimos nada porque lo que no se debe hacer es decir si y después no.

Un beso. Mamá