Me resulta difícil redactar esta entrada, me siento culpable de tantas felicitaciones que han quedado en el tintero. Tengo la tentación de desaparecer pero estoy demasiado vinculada a nuestro blog y a los blogs que visitaba habitualmente que prefiero dar la cara y pedir disculpas.
Se agolparon los acontecimientos, vencían los plazos, venían los chicos y la comida … los regalos sin comprar.
2010 ha sido un año muy duro, ajetreado y complicado hasta el final. Me ha dejado una bronquitis de la que aún no me he recuperado por lo que he tenido que conformarme con mantener los “servicios mínimos”, por eso prescindí del blog y de esas actividades que son el colorido de mi puzzle.
La mayoría de las fiestas las pasamos en casa. Pero recibimos el año en Fátima. Fue una estancia corta pero tuve la sensación de estar “en casa”: reposo, acogimiento, seguridad… (creo que todos atuvmos este sentimiento, nadie tenía prisa para marchar).
Han sido unas Navidades cálidas, en armonía. Los Reyes, aunque más austeros, agradaron a todos.
Como balance final, estoy feliz porque la aridez de este año me ha liberado de algunos miedos que me tenían atrapada. Me siento más libre y por ello más responsable y más comprometida a "ser" auténtica
porque ya no puedo alegar en mi defensa miedo insuperable a acontecimientos que me aterrorizaban.
En las fotos las últimas horas de 2010
Bueno familia... ¡feliz año! Qué bien se os ve en las fotos... Entiendo perfectamente lo que dices Mª Jesús porque a nosotros nos pasa más o menos igual. Vinieron mis padres a casa, los tres niños, mis suegros... ¡yo trabajando como podía! En fin, muy entrañables pero muy cansadas... ¡Mira que dan de sí 90 metros cuadrados! Lo importante es estar juntos y saber priorizar. Yo, personalmente, os tengo presentes a mi manera y me acuerdo mucho de vosotros. Aquí seguimos. Juntos. En el mismo barco. Cualquier días nos asomamos a León... ;-)
ResponderEliminarAbrazos
Cuánto me alegro de que vuelvas a actualizar. Me encantan las fotos. ¡Feliz año para toda la familia! Qué suerte que os organicéis (a pesar de ser tantos) para viajar.
ResponderEliminarQúe te mejores Mª Jesús. Y que no dejes el blog sino que lo retomes con fuerza este año. Un abrazo!!
Feliz Año, María Jesús. ¡Que hijos más guapos tienes!, y sigue actualizando que se te echaba de menos.
ResponderEliminarUn beso
Menudo lujo de familia sois.
ResponderEliminarNo te disculpes que todos tenemos problemas para alcanzar a la vida que a veces corre más de lo que somos capaces de soportar. Te entendemos perfectamente.
¡Feliz año nuevo!
Bienvenida al club de los "broncquíticos".
ResponderEliminarQué buen modo de empezar el año, nada menos que en Fátima.
Que María os proteja a toda al familia.
¡Feliz año!
El mejor sitio para empezar el año.
ResponderEliminarMe hago seguidora de vuestro blog para estar más cerca de vosotros.
ResponderEliminarFeliz Año.
Nada, que con el año nuevo tampoco se me actualiza tu blog. Pero en fin, FELIZ 2011, a mí ese número me gusta, fijate tú.
ResponderEliminarHoy, te lo creas o no, pensé en tí. No teníamos contacto desde...
Uff, ni me acuerdo. Y me dije que bajaría hasta los fondos de mi blog a ver que pasaba.
Me alegro del cambio de pilas y de que todo esté bien.
No te/os olvido.
Besos
Cuanta sensatez en el escrito¡¡
ResponderEliminarCuanta felicidad en los rostros de las fotos¡¡
María Jesús,
ResponderEliminaryo también soy un desastre, con el agravante de que lo he sido toda mi vida. Todos los años pienso en mandar felicitaciones (de las de verdad, de las que se meten en los buzones) y siempre me pilla el toro y acabo por darme por vencido.
También tendré que hacer el propósito de volver con más fuerza. Me lo dijiste tú misma hace algunos meses: hay mucho por lo que luchar y debemos hacerlo desde todos los frentes posibles.
Un besazo para todos vosotros, y MUY FELIZ AÑO (aunque sea algo tarde).
Esto es una bendita familia! gracias por mostrarnosla un abrazo.
ResponderEliminarPues no sé cómo no nos vimos; nosotros también recibimos el 2.011 en Fátima.
ResponderEliminarUn abrazo