domingo, 17 de octubre de 2010

CON EL MAZO DANDO pero a DIOS ROGANDO

Siempre intento conseguir resultados a base de machacar, de machacarme, pero muchas veces la realidad se impone y consigo muy poco. Hubo un tiempo en que me desesperaba para evitar "el mal rollo" por donde parecía acampaban nuestros hijos. El ambiente era aterrador, las circunstancias críticas, me sentía impotente y ganas me daban de interpelar al cielo y exigir resultados a mi incansable trabajo. Pero opté por resignarme, seguir pidiendo, y aceptar lo que "a todas luces" terminaría fatal a pesar de mis cuidados. Pasó el tiempo y como "no llegó la sangre al río" (ni siquiera hubo sangre) me olvidé de aquellos episodios.

..pero fué ayer, precisamente ayer, cuando me acordé oyendo las lecturas del día: "Y sucedió que mientras Moisés tenía las manos arriba, se imponía Israel, pero cuando las bajaba, se imponían los amalecitas.... Se le cansaron los brazos a Moisés; entonces tomaron una piedra y sentaron a Moisés sobre ella, mientras Aarón y Jur le sostenían los brazos, uno a cada lado. Así, Moisés mantuvo sus brazos alzados hasta la puesta del sol” (Exodo, 17,11-12).

La batalla no se perdía mientras los brazos estuvieran en alto,....!!! Uyyyy, pensar que en aquellos dichosos momentos estuve a punto de bajarlos, pensando que dejando de actuar ya no había más que hacer.

Y caí en la cuenta de quien es El quien construye la casa y llega a donde no llegamos nosotros, pero tenemos que hacer nuestro trabajo, que a veces consiste en eso... en mantener los brazos en alto sin desfallecer.

9 comentarios:

  1. Muchas veces, tentados por el cansancio y las preocupaciones mundanas, nos olvidamos de qué es lo realmente importante. A veces no conseguimos ordenar las cosas de forma correcta y anteponemos “lo nuestro” a Dios. De ahí que el trato frecuente con el Señor sea importantísimo. De ahí, también, que los ejercicios espirituales y los retiros mensuales sean una herramienta casi imprescindible para avanzar, para vencer y para ser realmente felices y hacer felices a los nuestros.

    Un abrazo.

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  2. Jopetas!!!! Maria Jesús, no te puedes imaginar lo bien que me ha venido leerte hoy.
    He empezado el día a trompicones.
    Espero que mis adolescentes maduren pronto.
    ¡¡¡VAN A ACABAR CONMIGO!!!!
    GRACIAS JESUSILLA!!!

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  3. Pregúntale a tu hijo Luis sobre Moisés y los amalecitas...

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  4. maria jesús, no sé decirte gracias porque siempre logras mandarme el mensaje justo en el momento adecuado o confesar que te "odio" (muy poquito) por ello.

    en cualquier caso, me ah quedado claro,¡MANOS ARRIBA!
    un abrazo

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  5. Mi madre me enseñó de pequeño a hacer lo mismo que ella hacía de pequeña y es a rezar de rodillas con los brazos en cruz.
    Ahora de forma instintiva siempre que puedo lo hago así.
    Cuando leí hace unos años este mismo texto de Moisés, me hizo pensar que quizás la oración así hecha sea "más" oración todavía.

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  6. Con esa lectura pensé lo mismo que tú: no bajar los brazos sólo porque llevo años pidiendo unas conversiones que parecen que no ocurrirán.

    Saludos

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  7. Una gozada como siempre tus reflexiones, mi querida amiga...
    un abrazo muy grande

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  8. Qué bueno leer cosas como ésta. Cuando uno es idealista tiende a pensar que a casi todo el mundo le va mejor que a uno mismo. Y no piensas en el esfuerzo que llevan los demás a sus espaldas, en los malos momentos, incluso en la oscuridad en la que han podido vivir. Simplemente piensas "a los demás les va mejor que a mí". Pero estar en contacto con familias con las que compartes lo más importante, es también una ayuda para decir eso mismo que tú dices "yo tampoco debo bajar nunca los brazos".
    Últimamente pienso mucho en lo de las "etapas". María nos lo está haciendo pasar fatal con su "etapa" (dicen) de los dos años de la negación, y la súper mamitis que sufre, que hace que NADIE pueda atenderla salvo yo misma. Necesita un hermanito YA! (eso sí, con el carácter que tiene, habría que verla en su "etapa" de celos...)

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  9. La vida es así amiga, y como tú bien dices, queremos llegar a todo y a todos, pero somos limitados y hasta que no nos demos cuenta de ello, no cumpliremos del todo nuestras espectativas, creyendo que podemos llegar aún más allá...
    No tirar la toalla, pero tampoco morir en el intento.
    La gasolina para que nuestro viejo coche siga andando, que cada cual la reposte donde más cuenta le tenga. Pero ante todo, no apurar el dedpósito.
    ;)
    Besos

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