domingo, 12 de abril de 2009

La llamada de Nicodemo


Me gustaría identificarme en la pasión con la Verónica, que altiva y valerosa esquiva a los soldados romanos y limpia candorosamente el rostro de Jesús, pero, sin embargo, es Nicodemo el que me guiña el ojo cuando le encuentro, como si tuvieramos un secreto en común. Ni siquiera coincidimos en el sexo pero ahí está sonriendo, tendiéndome la mano en la actitud comprensiva del que ha pasado por el mismo miedo, las mismas dudas.
Durante años he ignorado su presencia pero es más "cazurro" que los de mi tierra. "Yo también tenía miedo -me dice- me encontraba con Jesús de noche, temía perder mi puesto de Maestro de la Ley, pero los ojos de aquél Hombre me cautivaban, sus palabras iluminaban la Ley con un resplandor nuevo, el del amor, las señales que hacía venían de Dios. Al primer encuentro sucedieron otros y fui entendiendo. Tu también sientes en tu espíritu el anhelo de la Verdad pero tienes miedo. ¿Te asusta la idea de un nuevo parto, a tí que has parido tantas veces?. Si, es cierto, es un parto nuevo, un nuevo inicio y un nuevo fin, pero si no naces del agua y del Espíritu no podras ver a Dios. Yo no entendía cuando me lo dijo el Maestro, pero cuando le ví en la Cruz, pronunciando el grito victorioso: TODO ESTA CUMPLIDO, mi miedo desapareció. Las escrituras, que tan escrupulosamente había cumplido, se volvieron luz ante su amor. Ya no tuve miedo y me hice niño de nuevo; no necesité la Resurección para proclamarle como mi Dios y abrazé su cuerpo entre mis manos. Ven acércate, no tengas miedo".

16 comentarios:

  1. grande la imagen para poder apreciarla mejor.
    Realmente es preciosa.

    Besos.

    ResponderEliminar
  2. He tenido que recurrir a la wikipedia.
    No sabía quien era.
    Ahora entiendo mejor lo que dices.

    Besos.

    ResponderEliminar
  3. Es curioso cuantas historias dentro de LA HISTORIA en la biblia, y cuantos personajes de los que aprender.
    Preciosa la foto de la escultura en la arena.
    Un besazo

    ResponderEliminar
  4. Hermosa historia, llena de fuerza y esperanza. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Qué bonito MJ, me ha encantado.

    La maravilla de los Evangelios es que todos estamos retratados en ellos, por eso es el Libro de la Vida de todos y de cada uno.

    La gran gozada es ir descubriendo el misterio de nuestra vida a la luz que arrojan.

    Un abrazo muy grande para todos en casa. ¡Feliz Resurrección, cariño! nuestra gran esperanza.

    ResponderEliminar
  6. Felices Pascuas!!! mas vale tarde que nunca...

    Me gusto mucho tu escrito.

    La imágen bellísima!!!

    Cariños,

    Silvia

    ResponderEliminar
  7. Pensar en el amor con que se ha esculpido en la arena la imagen. Me recuerda la cancion de la barca, que le cantabamos en el Bernabeu al Papa JPII.

    ResponderEliminar
  8. Feliz Pascua a toda esa gran familia¡¡¡
    Me ha parecido preciosa la narración, por todo lo que de verdad hay detrás... el miedo... que muchas veces nos ata y no nos deja ser libres. Menos mal que el Señor vence todos nuestros miedos, cuando se lo pedimos de corazón.
    Muchos besos, Mª Jesús.

    ResponderEliminar
  9. Aunque llegue con retraso no quiero que os falte mi felicitación por esta Pascua de Resurrección.
    Bonita la historia de Nicodemo, y también muy bonita la escultura en la arena. ¡Cuanto realismo formado por partículas tan pequeñas! Pareciera la humanidad hecha Cristo.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  10. Una buena imagen, la de haber pasado por tantos partos, para expresar esa necesidad de nacer de nuevo, algo que siempre da miedo, porque estamos demasiado aferrados a nosotros. Una gran entrada. Felices Pascuas.

    ResponderEliminar
  11. Como siempre, María Jesús, se puede decir más alto, pero no mejor.

    Sinceramente, nunca había visto las palabras "Todo está cumplido" como un grito de victoria; más bien como una aceptación de la Voluntad del Padre; algo así como lo que decimos cuando nos mandan a hacer algo y lo acabamos.

    Pero con esta perspectiva que le das, todo tiene más fuerza, más sentido: "Todo está cumplido". Nada se ha interpuesto entre lo que tenía que hacer y lo que realmente he hecho; ni las tentaciones, ni el miedo, ni el dolor, ni siquiera la muerte: "Todo está cumplido" tal y como tenía que cumplirse. Es una buena meta a la que aspirar: que en nuestro último aliento de vida aquí en la tierra podamos decir: "Todo está cumplido"...

    Gracias, como siempre, por la entrada...

    ResponderEliminar
  12. Tienes toda la razón, muchas veces tenemos miedo, y nos puede la cobardía, cuando sabemos y eso es lo peor, que lo sabemos, que dar un paso al frente por Jesús es un acierto garantizado, pero hija yo soy la primera que no se lo mete en la cabeza.

    Un besazo muy fuerte.

    ResponderEliminar
  13. Supongo que habrás leído el libro "Cartas de Nicodemo", a mi me gustó mucho porque aparte de hacerme ver a un Jesús profundamente humano, también me hizo identificarme con un hombre que luchaba entre su razón y su corazón a quién al final el Espíritu, le ayuda a encontrar el camino y disipar sus dudas.

    Llevo un tiempo ausente, pero siempre os tengo presentes. Un abrazo a todos.

    ResponderEliminar
  14. Que lindo, lo escribiste tu?? Definitivamente yo también me identifico con Nicodemo.....

    Un abrazo, Andrea

    ResponderEliminar