reflexiones en el tren de vuelta de Navidades

Es sorprendente como después de miles de años todavía siga existiendo debate respecto a si existe la verdad absoluta o si la corriente correcta es el Relativismo, curiosamente esta segunda es descartada por la mayoría de las personas que se plantean esta cuestión pero es la imperante en la vida diaria de muchas personas. Cierto es que decir que tu verdad es absoluta y negar cualquier argumento contrario sin fundamentación no es adecuado, pero entonces, ¿cuál es la realidad?

Respecto a esto, a mí me gusta el pensamiento de Ortega y Gasset en el cuál explica la teoría del Perspectivismo, esta etapa filosófica de Ortega nos da a entender que la realidad es única y objetiva pero cada persona tiene una visión diferente porque la ve desde lugares distintos. Figuradamente, se podría decir que existe un objeto externo a nosotros, el cuál solo podemos describir según la parte en la que nos encontremos, si comparamos nuestra descripción con otra de la persona que se encuentra en otro lado, puede ser diferente aunque no contradictoria y aún así que ninguno de los dos estemos equivocados.

Para mí, esta teoría tiene una denotación un tanto frustrante ya que nunca podremos conocer un "objeto" en su totalidad, salvo que dicho "Objeto" pueda describir todas sus propiedades fielmente y revelarse a nuestra percepción, tal "Objeto" necesitaría un grado de perfección mucho mayor que nosotros ya que no somos capaces de delimitar nuestra existencia con exactitud, mucho menos revelarnos a otros.

Desde mi punto de vista, esto también tiene en cuenta la libertad individual y la tolerancia. No sería adecuado que una persona que conoce un objeto por una revelación personal, obligase a otra que no ha tenido dicha revelación a pensar de igual manera y a actuar respecto a una cosa que no ha experimentado. A cada persona se le piden unas mínimas exigencias, como son el respeto al pensamiento ajeno, actuar lo mejor posible y de forma coherente con la realidad que ha podido vislumbrar y sin juzgar a las demás personas con la misma vara que nosotros mismos, ya que pueden no saber la Verdad que nosotros conocemos en ese momento. Aunque si es exigible al resto de personas que intente buscar por sí mismo la Realidad, ya que una vida sin preguntas no es una vida plena. MANUEL ROA